Zona de adaptación influencia y control

Tener la SEGURIDAD EN NUESTRO MUNDO INTERNO, es una necesidad básica y necesaria

Pero… cuando en nuestra vida no hemos conseguido tener esa seguridad

Como mecanismo defensivo, hemos tenido que sustituirlo con CONTROL, lo cual en muchas ocasiones es una fantasía. A pesar de ser irreal, lo asumimos como una realidad indiscutible, en la que obviamos el coste que eso nos va a suponer.

Te proponemos una regla mnemotécnica para recordar y tomar consciencia de las circunstancias en las que realmente tenemos control y en las que no.
Imagina un huevo frito en un plato:

Vamos a encontrar 3 áreas diferenciadas:

– El Plato, que supone la ZONA de ADAPTACIÓN: Es la zona donde ocurren cosas que escapan a nuestro control. Para disminuir el posible sufrimiento que esto nos puede generar, podemos adaptarnos, si es que es un lugar donde es posible esa adaptación o, si no es viable, tocará “cambiar de plato”
– La Clara, que será la ZONA de INFLUENCIA: Es la zona donde aquello que haces o sientes depende en parte de ti y en parte de otra u otras personas
– La Yema, que es la ZONA DE CONTROL, sobre la que si tenemos posibilidad de acción. Es la zona donde lo que haces o lo que sientes depende de ti

¿Qué encontramos en las diferentes zonas?

– Zona de control: Responsabilizarte de Tus palabras, Tus acciones, Tus decisiones, Tus pensamientos, Gestionar tus emociones/ sentimientos
– Zona de Influencia: Los amigos, la familia, la salud, tu reputación, tus finanzas, tu progreso en determinadas áreas de tu vida, ambiente de trabajo, acciones para mejorar tu calidad de vida o tu futuro
– Zona de adaptación: El pasado, El comportamiento de otras personas, Las noticias, la economía, La política exterior, El tiempo, Desastres naturales, la muerte, guerras, tráfico.

Analiza en qué área se encuentra aquello que te inquieta y, si puedes hacer algo, focaliza tu energía en ello, siempre que esté en la zona de control e influencia, porque focalizarnos en aquello que está en la zona de adaptación, conlleva mucho desgaste físico y emocional y las probabilidades de modificarlo, es una batalla perdida. Esa energía puedes enfocarla en acciones que, aunque también consuman tu energía, seguramente, te salgan más a cuenta.

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